Si ya tomaste la decisión de empezar a entrenar pero al paso de los meses no ves los resultados deseados, es momento que consideres la opción de un entrenador personal. Sin embargo, debemos elegir al personal trainer indicado, ya que no cualquiera puede ser el más adecuado para nosotros. Por eso, en FitWorld te decimos los aspectos más importantes a tomar en cuenta.
Lo primero que debemos tener claro es lo que queremos conseguir. Por norma general un entrenador personal suele estar más especializado en una determinada disciplina que en otra. Para ello es importante que mantengamos con él una reunión previa en la que nos explique cuáles son sus especialidades. Además, esto nos servirá para tomar un primer contacto con el entrenador y saber si conectamos o no.
El entrenador ideal debe preocuparse de la perfecta ejecución de tus rutinas. Siempre deberá detallar la técnica y el movimiento, así como el peso y los resultados que vamos a tener en cierto tiempo. Aquí es imprescindible que pongamos de nuestra parte, ya que el aprendizaje de la correcta técnica depende de nosotros para conseguir un progreso constante.
Otro punto a tener en cuenta para elegir un buen entrenador es saber si nos escucha. Habrá ejercicios que amemos y nos sean fáciles pero habrá muchos otros que detestemos pero que son los que nos harán trabajar más a fondo. No obstante, un buen entrenador debe saber parar antes de que nos lesionemos y sobre todo saber los ejercicios que se ajustan más a nuestra fisionomía y experiencia.
El personal trainer que elijamos debe ser aquel que innove y esté al tanto de las tendencias, es decir, debe conseguir que no caigamos en la monotonía. De hecho la mayoría de nosotros recurre a sus servicios cuando estamos estancados. El efecto sobre nuestros entrenamientos será inmediato sin darnos apenas cuenta.
Un buen entrenador no debe ser nunca servil o como decimos “barco”. Está bien que nos ayude a completar las rutinas y sobre todo al principio a aprender. Pero es bueno y necesario que nos enseñen las técnicas, las cargas, los motivos de por qué hay que seguir un orden en la ejecución de los ejercicios. Si nuestro objetivo es tener un cuerpo trabajado, entonces un buen entrenador nos debe dejar en algún momento valernos por nosotros mismos.
Finalmente, un entrenador excelente nunca nos va a obligar a hacer algo que ponga en riesgo nuestra integridad física. Por ello es necesario que tengamos esto muy en cuenta. Si nuestro entrenador nos exige metas elevadas que no podemos conseguir, no nos escucha o no tiene en cuenta nuestros gustos, lo mejor es decantarnos por cambiar por otro durante una temporada. Muchas veces es necesaria la variación para conseguir acertar con la elección y conseguir así el entrenador perfecto.
Recuerda que un personal trainer debe ser alguien que te escuche, se preocupe por ti y que innove.
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Fuente: Vitónica
