¿Te gustaría mejorar tu dieta? Una de las primeras cosas que debes hacer es reducir la comida conocida como chatarra o procesada. Los alimentos procesados son aquellos alimentos naturales que han recibido algún tratamiento industrial y, normalmente, los podemos identificar porque vienen en bolsas, paquetes o no tienen su forma o composición original.
A veces, no es fácil eliminar la comida procesada de la dieta. De hecho si te das cuenta, la mayor parte de alimentos que hay en un supermercado son procesados. Casi todos los anuncios de alimentos, son de alimentos procesados y, si salimos a comer fuera, la mayor oferta alimentaria que tenemos es de alimentos procesados. No es fácil, pero no es imposible.
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Estas son algunas recomendaciones para que pueda ir eliminando poco a poco este tipo de alimentos de tu dieta.
#1 Elimina los refrescos y añade agua
Las bebidas azucaradas son tan frecuentes en nuestra dieta que muchas veces no nos damos cuenta de que son un lastre en nuestra alimentación. El azúcar actúa como una droga, por lo que no es fácil para quien consume refrescos a diario, dejarlos y pasar a beber agua de la noche a la mañana, pero sí que hay cosas que podemos hacer para ir reduciendo su consumo.
Puedes marcarte retos a corto plazo. Este es ejemplo de cómo reducir el consumo de bebidas azucaradas:
Semana 1: beber solamente una bebida azucarada al día. El sábado o domingo es día libre.
Semana 2: beber una bebida azucarada, un día sí y otro no. De nuevo, sábado o domingo es libre.
Semana 3: beber solo bebidas azucaradas en fin de semana.
Semana 4: beber solo una bebida azucarada el sábado y libre el domingo, o viceversa.
Semana 5: beber solamente tres bebidas azucaradas durante el fin de semana.
Semana 6: beber dos bebidas azucaradas durante el fin de semana.
Semana 7: beber una bebida azucarada durante el fin de semana.
Semana 8: intentar no beber ninguna bebida azucarada durante toda la semana.
Otra estrategia que podemos seguir es la de sustituir esas bebidas azucaradas por otro tipo de bebidas. El agua, como hemos dicho, es la mejor opción, pero también podemos sustituir los refrescos por nuestros propios jugos naturales, té o similares. Puede funcionar añadirles al agua unas gotas de limón o naranja: le da algo de sabor y no extrañarás tanto el dulzor de otras bebidas.
#2 Cambiar los snacks tradicionales por snacks saludables
Esto tampoco es fácil, porque los snacks preparados, es decir, “de bolsa”, tipo papas fritas, nachos, etc. son ricos en sal, azúcares, grasas o saborizantes, lo que los hace muy apetecibles. Pero podemos hacer nuestros propios snacks.
El sustituto más recomendable son los frutos secos crudos: nueces de la India, almendras, nueces de Castilla y semillas de girasol. Sin embargo, todo y ser grasas saludables, no comas más de un puñado al día.
#3 Más frutas, vegetales y hortalizas
Este tipo de alimentos es más normal que los tomemos al natural, no hay tantos alimentos procesados derivados de ellos. Ir a la verdulería y llenar tu refrigerador y despensa de frutas, verduras y hortalizas va a hacer que desplaces de la dieta a otros alimentos procesados.
Por ejemplo: fruta natural en lugar de en almíbar, vegetales u hortalizas hervidas, cocidas o crudas en lugar de platos precocinados. Ensaladas en lugar de snacks o entrantes procesados. Fruta cómo postre en lugar de helados, postres lácteos (flanes, yogurt, etc.), pasteles o similares.
Sabemos que es fácil cansarse de las frutas y las verduras, por eso lo mejor es ir variando. La forma más fácil de variar estos alimentos es consumir los de temporada.
#4 Cocina en casa y no comas en la calle
Toda la comida precocinada o rápida de preparar es procesada. Aprender a cocinar es una de las mejores formas de evitar los alimentos procesados. Normalmente cocinamos con alimentos naturales, sin tratar: carnes, pescados, huevos, vegetales, hortalizas…Cocinar en casa preparando nuestro propio menú nos asegura utilizar menos la comida precocinada procesada.
Otro ejemplo en cuanto lo que puedes preparar en casa, es el hacer nuestros propios aderezos con alimentos saludables. (link recetas fitness de aderezos saludables).
#5 Una lista de la compra sin procesados es una dieta sin procesados
En la cesta de la compra está la clave para eliminar los procesados de tu dieta. Todo lo que hemos comentado se resume en: hacer una buena lista de la compra. Si cuando vamos a comprar dejamos de lado los alimentos procesados, ya solo los tendremos el día que comamos fuera de casa. Como reza el dicho: “la mejor forma de no caer en la tentación es evitarla”.
Sabemos que en los supermercados y grandes zonas comerciales, es complicado no toparse con comida procesada, sin embargo puedes evitar pasar por esos pasillos y solamente concentrarte en los de comida sana.
Verás cómo al final te acostumbrarás a comprar carne y pescado, en lugar de sus derivados, a comprar frutas y verduras, en lugar de snacks u otros acompañamientos para el plato principal y, lo más importante, volverás a apreciar el sabor y calidad de la materia prima, sin procesar, que eso también es importante. Volverás a reeducar a tu paladar a sabores más puros, provenientes de alimentos sin tratar.
Si eres de los que entrena a diario y cuida su cuerpo, no tiene sentido no cuidar la alimentación. Verás que cuando en tu cesta de la compra se base en alimentos digamos “naturales”, los procesados pasarán a un segundo plano e incluso irás perdiendo la apetencia por ellos.
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Fuente: Vitónica
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