Uno de los principales problemas en nutrición en nuestro país no son tanto las grasas, sino el azúcar. El exceso de azúcares añadidos en nuestra alimentación está relacionado con un mayor riesgo de sobrepeso y obesidad, de enfermedades cardiovasculares y metabólicas e incluso un mayor riesgo de algunos tipos de cáncer.
En FitWorld entendemos por “fit” o “fitness” un estilo de vida que equilibra actividades físicas, alimentación saludable, disciplina mental, responsabilidad social y actitud positiva hacia el mundo que te rodea.
Debemos replantearnos nuestros hábitos alimenticios y tomar decisiones que nos ayuden a reducir la cantidad de azúcar añadido que tomamos al día. Aunque evitarlo completamente es complicado, hay algunos consejos en FitWorld te animamos a seguir.
#1 Dale un giro a tu desayuno
¿Has pensado qué productos conforman tu desayuno habitual? ¿Cereales comerciales? ¿Galletas? ¿Jugos procesados? Si revisas los ingredientes de todos estos productos verás cómo su contenido en azúcar es muy alto.
Es en la primera comida del día cuando muchas personas cubren -y se pasan- de la cantidad máxima de azúcar que recomienda la OMS (5 gramos de azúcar al día) ya que los productos que se asocian al desayuno suelen ser extremadamente azucarados.
Si lo que deseas es reducir la cantidad de azúcar total que tomas al día, puede ser una buena idea replantearte el desayuno. Debes cambiar esos productos por otros no procesados, como tostadas, frutas, cereales sin azúcares añadidos, huevos, queso, yogurt natural…
#2 Dile adiós a los refrescos azucarados
La cantidad de azúcares en estas bebidas es muy alto, y más aún si tenemos en cuenta que no nos aportan a cambio ninguna propiedad nutricional interesante.
Se trata, por tanto, de una de las primeras medidas a tomar si queremos reducir el azúcar añadido de nuestra dieta: dejar de beber refrescos azucarados y cambiarlos por agua simple o aguas de sabor preparadas en casa y sin azúcar.
#3 Evita los alimentos procesados
Lo alimentos procesados nos pueden parecer una ventaja por su variedad y comodidad a la hora de prepararlos, pero de hecho a la hora de cuidar nuestra salud, cuanto menos recurramos a ellos, mejor. El motivo es que si le damos leemos las etiquetas nutricionales de éstos, veremos que además de los que podríamos identificar, suelen llevar incorporados otros que no nos esperamos. Y entre ellos, el rey es el azúcar. A veces se llama azúcar directamente, otras veces es jarabe y otras veces recibe otros nombres, pero el resultado es el mismo: estamos ingiriendo más azúcar del que pensábamos.
#4 Mejor fruta que jugo (aunque sea casero)
La fruta es parte imprescindible de cualquier dieta (a no ser que alguien padezca un problema específico de salud) y aunque también contenga azúcar, se trata de azúcares intrínsecos, no añadidos, que no solo no hay que excluir, sino que conviene incluir en nuestra alimentación.
Sin embargo, es importante que en la medida de lo posible tomemos la fruta entera, y no solo en jugo. El motivo es que la fruta, además de azúcares, tiene otros componentes importantes, principalmente una buena aportación de fibra, que hacen de ella un alimento mucho más completo que si la convertimos en jugo y desechamos el resto.
#5 Aguas con los postres
Los productos lácteos y derivados que solemos tomar como postre (y que damos a menudo a los niños) tienen una estrecha relación con el azúcar que debemos tener en cuenta. En algunos la relación es obvia (helados o natillas, por ejemplo) pero en otras, no tanto (yogures griegos, de sabor o 0% materia grasa).
Eso no quiere decir que tengas que desterrarlos de tu refrigerador, pero sí que debemos comprobar la etiqueta de lo que compramos para elegir con criterio aquellos que contengan menos azúcares.
#6 Endulza con otra cosa
Abandonar poco a poco el omnipresente sabor dulzón e ir aprendiendo a apreciar otros sabores es una forma de ampliar la experiencia gastronómica, aunque no sea fácil para todos.
Plantéate otras opciones de endulzado. Ten en cuenta que ninguno es inocuo para tu salud y que todos debes consumirlos con moderación, pero algunos de esos productos, como la stevia o la miel, tienen un gran poder endulzante en menores cantidades, de forma que si no puedes prescindir de un toque dulce, estas pueden ser buenas alternativas para ti.
En FitWorld te canalizamos con los mejores expertos en nutrición para que te asesoren en un programa alimenticio diseñado en exclusiva para ti. ¡Escríbenos en pontefit@fitworld.mx y con mucho gusto te atenderemos!
Fuente: Vitónica