En el mundo del running hay muchas creencias que son falsas. Algunas son tan inofensivas que hasta son graciosas, sin embargo, hay otras que pueden comprometer nuestra salud y nuestro rendimiento deportivo.
En FitWorld te compartimos una serie de recomendaciones para superar esas leyendas urbanas y convertirte en un mejor corredor este año.
Mitos sobre entrenamiento
Mito 1: “Los corredores no deben correr por asfalto para entrenar”
Existen estudios biomecánicos que constatan que el impacto que se produce en asfalto o cemento es poco mayor que el que se produce sobre tierra o pasto, debido a que sobre terrenos más duros el corredor realiza de manera instintiva un aterrizaje más suave, generando por tanto casi el mismo impacto que sobre otros terrenos más blandos.
Recomendación: No es malo incluir entrenamiento por asfalto, incluso más de la mitad del volumen total, pero sí que es recomendable parar y andar unos cuantos pasos cada 8 o 10 minutos, ya sea por asfalto o hierba, y así darle un respiro al impacto repetido.
Mito 2: “Las series son lo más importante para el corredor de fondo”
No es correcto hacer esta afirmación, pues las series van a ser una parcela más del entrenamiento del corredor pero no la más importante, como muchos dicen. Además, en distancias largas como un maratón apenas se deberán realizar series y el trabajo se basará principalmente en las tiradas largas.
Recomendación: Si no te gustan las series, trata de sustituirlas por rodajes con cambios de ritmo en los que sin darte cuenta estés realizando series. Del mismo modo, hacer rodajes por zonas pequeñas de sube y baja harán que mejores tu nivel sin darte cuenta y sin tener que realizar series.
Mito 3: “Hay que estirar antes de comenzar a entrenar”
Mucha gente piensa que los estiramientos son algo obligado para antes de empezar a correr, pero lo cierto es que no es lo más recomendable debido a que es cuando la musculatura está fría y podemos lesionarnos. Lo ideal es realizar los estiramientos al final de la sesión de entrenamiento y siempre antes de habernos enfriado.
Recomendación: Si no tienes tiempo de estirar nada más acabar de correr, deja los estiramientos para justo después de haberte bañado, ya que podrás estirar los principales grupos musculares mientras aún estás en la regadera y con la musculatura mucho más receptiva para ser estirada tras haberse calentado de nuevo al haber recibido agua caliente.
Mitos sobre calzado y outfit
Mito 4: “Cuanto más ligeros sean los tenis, mejor”
Llevar unos tenis de poco peso nos hará correr más rápido, pero lo cierto es que tienen mayores carencias de estabilidad y control en la pisada, por lo que cuando vayamos a elegir unos nuevos tenis, será mejor guiarnos por otros aspectos que no sean el peso.
Recomendación: Reserva algún modelo ligero para tus competencias y si por tu constitución no puedes permitirte competir con un tenis liviano, utiliza alguna plantilla de silicona en los entrenamientos de los días previos; de esta manera conseguirás un peso extra que hará que cuando vayas a competir y te las quites te sientas como si llevaras un calzado de competencia.
Mito 5: “Los corredores deben ir siempre con playeras técnicas”
En los últimos años se han creado nuevos tejidos de poliéster muy ligeros y transpirables, pero eso no significa que no se puedan utilizar otros tejidos más naturales como el algodón, que aunque evacúa peor el sudor, hace las playeras más suaves y no generan tantas rozaduras en la zona de debajo de los brazos y en los pezones.
Recomendación: En temporada de frío, si tienes que ponerte varias capas, intenta alternar algodón y poliéster para un mejor aislamiento y tener mejores sensaciones corriendo. Cuando haga mucho calor procura humedecer tu playera un poco antes de salir a correr.
Mito 6: “Los mallones de compresión son solo para corredores que quieran evitar lesiones”
Muchas veces pensamos que los mallones de compresión solo los llevan los corredores que quieren prevenir y eliminar lesiones, pero además de eso se pueden utilizar para favorecer la circulación y actuar como medio de descarga muscular.
Recomendación: Tras haberte bañado después de realizar tus entrenamientos, ponte mallones de compresión durante unas horas. Con ello ayudarás a una mejora de la circulación y recuperación de la musculatura de las piernas.
Mitos sobre alimentación
Mito 7: “Los corredores pueden comer todo lo que quieran porque luego lo queman”
Cuando entrenamos tenemos un mayor gasto energético que hace que se quemen más calorías y que debamos de comer más, pero también se genera mayor gasto de otros nutrientes esenciales. Por ejemplo, si abusamos de dulces o bebidas alcohólicas, estaremos consumiendo calorías vacías que solo servirán para cubrir nuestras necesidades energéticas y nos lleván a un agotamiento paulatino de otros nutrientes.
Recomendación: Trata de tomar a diario de 2 a 3 cucharadas de levadura de cerveza en el desayuno (link nota levadura de cerveza), ya que su alto contenido en vitaminas del complejo B (excepto la B12) y ciertos minerales importantes como el cromo, el zinc y el hierro harán que esas calorías vacías que puedan provenir de geles, barritas, etc. que consumas, tengan menos impacto sobre tu salud.
Mito 8: “Los deportistas de resistencia tienen que comer mucha pasta”
Esta es una frase cierta a medias, puesto que cuando realizamos una actividad física fuerte como es correr necesitaremos ingerir no solo más hidratos de carbono (pasta, arroz, papas…) sino también más cantidad de proteínas (carne, huevos, pescado…) y de grasas (aceites, frutos secos…).
Recomendación: Dado que la proporción de los 3 principios inmediatos (hidratos, proteínas y grasas) que debe ingerir un corredor suele ser parecida, no hay que complicarse en los menús que se diseñen. Cuanto más desgaste calórico se tenga, más cantidad de comida comeremos proporcionalmente, sin tener que depender solamente de la pasta y los hidratos de carbono como nos han hecho pensar erróneamente durante años.
Mito 9: “Los corredores no pueden comer grasas”
Las grasas son esenciales para una alimentación equilibrada, el problema está en abusar de ellas y tomar las inadecuadas, como las refinadas y las trans. Encontrarás las de buena calidad en los frutos secos, el pescado azul o los aceites vegetales vírgenes extra saludables como el de oliva. Si restringimos radicalmente las grasas, podemos tener problemas de salud a nivel hormonal y carencias vitamínicas.
Recomendación: Antes de un entrenamiento o una competencia larga, prueba a hacerte un té o un café acompañado de una tostada de pan untada con aceite de coco virgen extra o mantequilla, ya que este tipo de grasas que a menudo nos han dicho que no son recomendadas por ser saturadas, contienen ácidos grasos de fácil digestión que te permitirán no pararte y darte un nivel de energía más constante que con barritas o geles.
En FitWorld te orientamos para que logres tus objetivos, obteniendo grandes resultados y canalizándote con especialistas, espacios de entrenamiento y desarrollo de actividades fitness adecuados.
Fuente: Sportlife