Se cree que la principal culpable del sobrepeso de muchas personas es el adoptar una dieta rica en carbohidratos. Debido a esto, las dietas bajas en carbohidratos han ganado popularidad con el tiempo.
Los carbohidratos son los encargados de proporcionarnos glucógeno (la forma de almacenaje de los hidratos de carbono), la fuente de energía primaria para nuestros músculos. No obstante, un alto aporte de estos puede derivar en producir unos efectos no deseados, como la ganancia de grasa, si precisamente, no se requieren grandes dosis de energía por falta de ejercicio o movimiento.
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¿Por qué debemos moderar el consumo de carbohidratos?
Ganar peso
En la pirámide de los alimentos recomendada por distintos organismos oficiales, los carbohidratos se encuentran en la base, es decir, las personas en teoría deben comer más hidratos de carbono que cualquier otro tipo de alimentos. Sin embargo, si consumimos más carbohidratos de los que nuestro cuerpo necesita, un porcentaje va a parar a las reservas de nuestro cuerpo, es decir, pueden almacenarse como grasa, y por tanto, hacer que ganemos peso no deseado.
La tendencia actual, donde debido a diversos factores “nos movemos menos”, bien sea por cuestiones relacionadas con el trabajo, sedentarismo, etc. propician que la recomendación de esta pirámide sea algo errónea.
Reducir enfermedades
Los hidratos de carbono estimulan la producción de insulina, la cual es una hormona cuya principal característica es de “almacenaje”. Además dicha liberación hormonal corre a cuenta del páncreas, de modo que uno de los efectos es la sobrecarga de trabajo si “abusamos” de los carbohidratos, especialmente de los simples o refinados. Entre las posibles enfermedades que encontramos se sitúa la Diabetes Tipo II, como una de las que potencialmente posee más probabilidades de que se desarrolle debido a una serie de hábitos. Comer carbohidratos no es en sí algo negativo, pero atendiendo a la condición de cada persona, es preciso regular su consumo.
Reducir consumo de carbohidratos
Muchas personas cuando buscan perder peso, tratan de eliminar muchos alimentos de su dieta ricos en carbohidratos refinados o procesados (como pan, pastas, harinas, galletas…) y cambiarlos por frutas y verduras, a fin de reducir el aporte de calorías vacías.
Tipos de carbohidratos
Hay tres tipos principales de carbohidratos:
Azúcar: es la forma más simple de carbohidratos y se encuentra naturalmente en algunos alimentos, incluyendo frutas (fructosa), verduras, leche (lactosa) y productos lácteos, o azúcar de mesa (sacarosa).
Almidón: es un carbohidrato complejo, es decir, lo forman un número determinado de moléculas de glucosa unidas entre sí. Se encuentra naturalmente en las verduras, granos y/o legumbres y tubérculos.
Fibra: también es un carbohidrato complejo, aunque con ciertas propiedades, que en algún tipo de los existentes (fibra insoluble), nuestro cuerpo no es capaz de absorberla. Ejemplos de fibra insoluble son: arroz integral, apio, salvado de trigo, cebada, zanahoria, nueces, dátiles…
La digestión de los carbohidratos
La digestión de los carbohidratos tiene el objetivo de reducir las moléculas de éstos a la unidad que nuestro cuerpo va a absorber: la glucosa. Esta pasará al torrente sanguíneo, y de ahí será transportada, por la acción de la insulina, hasta los depósitos (hígado y músculos). Los almidones son el grupo de moléculas que mayor digestión requieren dado que se encuentran formados a su vez por un gran número de unidades de glucosa. No pueden ser absorbidos por el organismo a menos que primeramente se descompongan en moléculas de glucosa mediante la enzima amilasa.
Ante una comida alta en carbohidratos, nuestro cuerpo reacciona liberando insulina al torrente sanguíneo para reducir los niveles de azúcar en sangre, lo que acarreará el almacenamiento de la glucosa en el tejido celular.
¿Qué son los bloqueadores de carbohidratos?
Tal como su nombre indican, son suplementos que permiten reducir las calorías procedentes de los carbohidratos que ingerimos, bloqueando enzimas necesarias para digerir ciertos tipos de carbohidratos, como el almidón. Los azúcares como la sacarosa, la glucosa o la fructosa, no se ven afectados
¿Por qué deberíamos usar bloqueadores de carbohidratos?
Si estamos realizando una dieta de control del peso, y buscamos optimizar los resultados, podemos incluir suplementos que nos ayuden a conseguir nuestro objetivo. En concreto, podemos ahorrar un porcentaje de las calorías que ingerimos cuando estamos con un régimen y buscamos acelerar el proceso. Las propiedades de los bloqueadores de carbohidratos NO debemos utilizarlas de manera compensatoria si realizamos una comida calórica, cómo por ejemplo, si estamos en un evento como una boda.
Beneficios de los bloqueadores de carbohidratos
→Ayudan a perder peso: suprimir un porcentaje de las calorías proveniente de los almidones puede significar, durante un tiempo prolongado, un buen motivo como para contribuir en el control del peso.
→Ayudan a controlar el apetito: pueden afectar a las hormonas relacionadas con el hambre y la saciedad.
→Ayudan a regular el azúcar en sangre: controlando la subida de insulina.
→Ayudan a incrementar el almidón resistente: los bloqueadores de carbohidratos impiden la digestión de carbohidratos complejos en el intestino delgado, haciendo que estos carbohidratos “funcionen” como almidones resistentes. Este tipo de almidón se comporta de manera similar a la fibra que no se digiere.
Pese a los beneficios de los bloqueadores de carbohidratos, la persona de mantener unos hábitos saludables, lo que permitirá conseguir mantener su forma o conseguir los objetivos planificados de mejora de la composición corporal.
¿Cómo funcionan los bloqueadores de carbohidratos?
Impedir la absorción. Los bloqueadores de carbohidratos actúan bloqueando la absorción de los carbohidratos mediante una serie de procedimientos. El más común es a través de ingerir una sustancia denominada faseolamina, la cual es un inhibidor de la alfa-amilasa, la enzima implicada en la digestión de los carbohidratos. Esta enzima se produce en la saliva y descompone los carbohidratos en moléculas más pequeñas que el cuerpo puede absorber. La acción de bloqueo de la faseolamina produce que muchos carbohidratos no digeridos puedan pasar a través del tracto digestivo.
Regular la glucemia. La mayoría de los suplementos bloqueadores de carbohidratos incluyen también otros ingredientes alimenticios cómo por ejemplo, cromo o vanadio. Estos sirven para controlar la sensación de apetito, mejorar el control de la glucosa en sangre y reforzar así la acción del bloqueador de carbohidratos.
El mineral cromo, que se puede tomar mediante suplemento en la forma de Picolinato de Cromo, es un ingrediente común en los bloqueadores de carbohidratos. El cromo es un oligoelemento que ayuda a metabolizar los hidratos de carbono y optimizar la captación de glucosa por parte del tejido muscular en lugar del adipocito de grasa. Un estudio de la Universidad Estatal de Louisiana demostró que 1,000 mg al día de picolinato de cromo disminuyó la ingesta 200 y 400 calorías por día en un estudio de ocho semanas realizado a 42 mujeres con sobrepeso. Las mujeres se sentían con menos hambre y perdieron más peso que las que tomaron placebo.
¿Son efectivos los bloqueadores de carbohidratos?
Los bloqueadores de carbohidratos no son efectivos al 100 por ciento, de modo que sólo pueden evitar que una parte de los carbohidratos que ingiere el usuario sean digeridos. Esta cantidad puede variar, pudiéndose alcanzar, en el mejor de los casos, bloquear en torno al 50-65 por ciento de las enzimas para la digestión de los carbohidratos.
Consideraciones a los suplementos bloqueadores de carbohidratos
#1 Este tipo de suplementos no bloqueará proteínas o calorías de grasas. Los alimentos ricos en carbohidratos normalmente también son altos en grasa o proteínas (como la pizza o papas a la francesa, por ejemplo), estos todavía podrían representar una amenaza para los resultados globales de pérdida de grasa.
#2 Algunas personas han observado que los bloqueadores de carbohidratos pueden causar malestar digestivo por lo que puede ser un punto a tener en cuenta.
#3 Dado que los bloqueadores de carbohidratos van a bloquear la absorción de parte de los hidratos de carbono, al hacerlo, también pueden bloquear la absorción de ciertos nutrientes, así que esto podría poner en riesgo de deficiencias nutricionales.
#4 Asegúrate de controlar esos puntos y de tomar medidas para hacer que tu dieta sea bien equilibrada, ajustando tus necesidades calóricas en función a tus objetivos. Muchas personas realmente disfrutan de apoyarse en los bloqueadores de carbohidratos para permitirse una mayor libertad y flexibilidad en su dieta, pero debes conocer los pros y los contras antes de decidir si son adecuados para ti.
Consejos sobre los bloqueadores de carbohidratos
Si lo que buscas es incluir la cantidad que te apetezca de hidratos de carbono, y tomar a la par estos suplementos, la respuesta es contundente… EVIDENTEMENTE NO. En cambio, para aquellas personas que se implican verdaderamente en mantener un plan nutricional y de entrenamiento adecuados, pueden resultar bastante eficaces. Suprimir en su totalidad los carbohidratos no es la solución, y tal como se mencionaba al comienzo, sí deberían ser consumidos de manera moderada y ajustada a nuestro nivel físico, y priorizar los alimentos ricos en fibra, como las verduras.
Es bien importante que antes de tomar nada, consultes a un especialista. Cada cuerpo es un mundo y pueden existir contraindicaciones.
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Fuente: HSN Store
