En ocasiones cuando buscamos lograr aumentar el volumen de los músculos, nos enfocamos tanto en el objetivo que dejamos de lado algunos riesgos que conlleva. Uno de ellos es la rabdomiólisis, una enfermedad que se produce tras la ruptura del tejido muscular y que puede traer graves consecuencias en la salud.
Este padecimiento puede afectar a cualquier persona, puede que sea un deportista de alto rendimiento o no, y sucede cuando se le exige al cuerpo más allá de sus capacidades.
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Además, hay disciplinas que tienen una incidencia mayor de padecerlo, como lo son el CrossFit, el Spinning o realizar maratones.
La rabdomiólisis es la ruptura del tejido muscular producto de un estímulo exagerado, como puede ser el exceso de ejercicio. Cuando esto sucede, algunas proteínas son liberadas en la circulación sanguínea. Una de ellas, la mioglobina, es particularmente peligrosa: afecta al riñón y puede causar insuficiencia renal aguda.
Si bien hay suplementos (los que contienen creatina, cafeína o efedrina) que pueden predisponer esta enfermedad, la mayor causa está relacionada a la actividad física en exceso.
Síntomas de la rabdomiólisis
Una de las principales formas de detectar la rabdomiólisis es a través de la orina: la mioglobina eleva la CPK (creatina-fosfocinasa) en sangre, lo que produce que el líquido adquiera un color amarronado.
Además, otra de las señales de advertencia que tiene esta enfermedad es sentir dolor muscular durante el ejercicio o en las horas posteriores. En este sentido es importante diferenciar el cansancio lógico de realizar una actividad física del dolor que pueda llegar a haber.
No obstante, para que haya certeza de que una persona padece rabdomiólisis se debe realiza un análisis de sangre y orina.
Tratamiento de rabdomiólisis
Para que el riñón no falle, el primer tratamiento para combatir la rabdomiólisis consiste en administrar grandes cantidades de líquido por vía intravenosa.
En etapas más avanzadas, esta enfermedad produce que los niveles de potasio en el cuerpo se eleven considerablemente, lo que puede provocar un ataque al corazón. En este caso, es necesario calcio para proteger a la persona de posibles complicaciones cardíacas y de insulina para redistribuir el potasio en las células.
Métodos para prevenir la rabdomiólisis
La rabdomiólisis es una enfermedad que se puede prevenir. El riesgo de padecerla disminuye si se adoptan algunas simples medidas preventivas.
Es recomendable realizar un buen precalentamiento antes de comenzar a realizar actividades físicas, o efectuar un entrenamiento progresivo hasta alcanzar el ejercicio deseado.
Además es importante estar en todo momento bien hidratado y estar al tanto de la temperatura en el ambiente en el que se está desarrollando la actividad.
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Fuente: Clarín
