Si hablamos de ejercicio cardiovascular utilizando una caminadora siempre nos imaginamos subir sobre la cinta, configurar la velocidad y ponernos a correr durante los minutos que queramos trabajar.
Sin embargo, no significa que tengamos que estar haciendo a diario el mismo ejercicio aparentemente aburrido y repetitivo en la caminadora. Existen diferentes variantes y alternativas que podemos utilizar para hacer de nuestro entrenamiento algo más variado y divertido.
En FitWorld te orientamos para que logres tus objetivos, obteniendo grandes resultados y canalizándote con especialistas, espacios de entrenamiento y desarrollo de actividades fitness adecuados.
Añade variedad a tu entrenamiento sobre la caminadora
Hay dos variantes con las que podremos trabajar y añadir dificultad y entretenimiento cuando hablamos de entrenamiento cardiovascular sobre la caminadora: la velocidad y la inclinación.
Utilizando estas variables, podemos incorporar algunos de los siguientes ejercicios a nuestra rutina para dinamizar nuestro trabajo y evitar la monotonía:
Zancadas hacia adelante
En este ejercicio, si jugamos con la velocidad de la cinta, nos veremos obligados a realizar las zancadas de forma más rápida, mientras que si el factor que vamos variando es la inclinación, trabajaríamos más el aspecto de fuerza de nuestro tren inferior.
Zancadas hacia atrás
Otra opción que podemos utilizar para no aburrirnos sobre la caminadora es la de realizar zancadas inversas o hacia atrás, de tal forma que nos colocaríamos dando la espalda al cuadro de mandos, ajustaríamos la velocidad y nos pondríamos sobre ella (con un pie en el suelo) para comenzar a realizar zancadas hacia atrás.
Zancadas laterales
Ejercicio similar al primero de los descritos, aunque aquí vamos a poder trabajar con una velocidad ligeramente superior, incluso llegando a realizar las clásicas zancadas laterales con un pequeño salto, de tal forma que aumentemos un poco más la velocidad del movimiento.
Sentadillas pliométricas
El ejercicio es sencillo: realizar una sentadilla de tal forma que al subir, demos un pequeño salto hacia arriba. Evidentemente, no podremos realizar una apertura de piernas mayor del ancho de la cinta. De ti depende configurar la velocidad y la inclinación.
Correr hacia atrás
Un ejercicio que está poniéndose en los últimos tiempos de moda es el “running backwards”, lo que denominaríamos como “correr de espaldas”. Para ello, tan solo deberemos seleccionar la velocidad e inclinación y comenzar con el ejercicio.
Rutinas HIIT en caminadora
En esta modalidad, el ejercicio a realizar se va a desarrollar realizando cambios tanto de velocidad como de inclinación en periodos de un minuto. Este sería un ejemplo de rutina:
*Minuto uno: comenzamos trotando a una velocidad cómoda de 9 Km/h (por ejemplo) y una inclinación cero. Aquí se trata de tomar como referencia una velocidad de inicio que nos permita realizar un trote cómodo y suave que no nos suponga esfuerzo.
*Minuto dos: bajamos la velocidad a 7 Km/h pero aumentamos la inclinación a dos.
*Minuto tres: reducimos la inclinación a uno pero aumentamos la velocidad a 10 Km/h.
Y así, sucesivamente, podemos ir realizando periodos de minuto en minuto jugando con la velocidad y la inclinación. En este caso, y dado que el ejercicio puede ser realmente agotador si le aplicamos una intensidad elevada, las rutinas no deberían durar más de 20 o 30 minutos como máximo.
¿A qué ya ves la caminadora con otros ojos? ¿Te atreves a probar todos estos ejercicios? En Fitworld buscamos que las personas compartan sus logros, experiencias y hábitos motivando a otras personas a superarse y cada día obtener mejores resultados. ¡Compártenos tus experiencias en pontefit@fitworld.mx!
Fuente: Vitónica